En España hay hasta 2.160 km de carreteras con riesgo elevado de accidente grave o mortal. Este dato, extraído del informe 2020 del programa europeo de evaluación del riesgo en la carretera, EuroRAP, nos hace plantear el peligro que supone circular con este tipo de deficiencias en las vías urbanas e interurbanas y qué se puede hacer al respecto.
Una carretera en mal estado, con socavones y baches, un guardarraíl en mal estado, una alcantarilla rota, o una señalización defectuosa, entre otros, puede provocar averías en los vehículos e incrementar las posibilidades de que se produzca un accidente de tráfico o que aumenten sus consecuencias.
Los neumáticos, los grandes damnificados
¿Cuáles son los componentes del coche que más padecen el mal estado de la vía? Los grandes perjudicados son los neumáticos. Y es que un firme deteriorado es habitual que provoque, como poco, un desgaste prematuro en ellos y, en última instancia, puede incrementar el riesgo de reventón.
A este componente, le siguen otras como la suspensión, que se encarga de absorber las irregularidades del firme, la transmisión y la dirección. Asimismo, la circulación continuada por carreteras o calles empedradas o en mal estado también puede causar el desajuste de los sistemas de fijación de elementos como el salpicadero, las puertas o las ventanas, incluso en el motor, lo que acabará provocando la aparición de ruidos y vibraciones que con el tiempo serán cada vez más molestos y difíciles de eliminar.
Por todo esto,y teniendo en cuenta el elevado número de carreteras con riesgo elevado de accidente grave o mortal, es vital posibilitar las opciones de los usuarios para denunciar estos riesgos y así anteponerse a sus graves consecuencias. En este sentido, el Race ha recogido el procedimiento que hay que seguir para denunciar el mal estado de las carreteras:
1. Averigua quién es el titular de la vía
El primer paso a realizar es descubrir quién es el titular de la carretera ya que, como responsable, será él quien tenga que responder ante los desperfectos. Hay varias posibilidades, puede ser el Estado, una Comunidad Autónoma, una Diputación Provincial o un Ayuntamiento. En caso de duda, siempre puedes llamar a la Policía o a la Guardia Civil para que te aseguren quién es.
2. Aporta pruebas
Para alertar del riesgo que supone la vía, es imprescindible que se acrediten pruebas. De esta forma, el denunciante tendrá que aportar fotografías o documentos que demuestren el mal estado de la carretera.
3. Contacta con el seguro
Aunque no es necesario, desde el RACE recomiendan que el usuario que quiera denunciar una falta de señalización, problemas en el mobiliario, desperfectos, caídas en la calle o cualquier otro tipo de incidente busque ayuda a través del servicio jurídico de su compañía aseguradora.
4. Pon la denuncia
Tanto si acudes a tu seguro como si no, lo siguiente que tendrás que hacer es poner la denuncia. Para ello, hay varias opciones. En primer lugar, tienes que saber que hay asociaciones y fundaciones, como por ejemplo la Fundación CEA, que se encarga de recoger las imágenes y grabaciones y transmitirlas a la administración pertinente.
En el caso de CEA, se ha creado una plataforma de denuncias en la que los ciudadanos pueden denunciar el mal estado de una carretera, la falta de señalización o una señalización confusa, entre otros muchos aspectos.
Asimismo, dan la opción de ver denuncias anteriormente publicadas junto a sus resoluciones. En el formulario de la denuncia, piden el nombre y apellidos del denunciante, el motivo de la denuncia y los archivos adjuntos como pruebas.
Otra opción es recurrir a las redes sociales de las administraciones públicas. En este caso, puedes informar a la Dirección General de Tráfico (DGT) o al organismo que tenga la titularidad de la vía a través de sus cuentas en las distintas RRSS.