Las luces de emergencia son los cuatro intermitentes o los warning que se utilizan para advertir al resto de conductores de algún inconveniente o peligro en carretera. Y se pulsa mediante un botón rojo con forma triangular que encuentras en el salpicadero del coche.
A pesar de que es uno de los temas a destacar en el momento en el que te sacas el carnet de conducir, muchos conductores profesionales dudan sobre cuándo utilizar las luces de emergencia correctamente. Pero por tu seguridad debes saber en qué momento hacerlo por tu salud y para así evitar a su vez, una multa.
Si no sabes cuándo tienes que poner las luces de emergencia, puede llevarte a una posible confusión. Tienes que saber que, al pulsar el botón, las luces delanteras y traseras parpadean con un color naranja. Normalmente, su uso es para indicar una parada, ponerte en segunda fila o avisar de un peligro.
Cuándo utilizar las luces de emergencia
Las luces de emergencia tienes que utilizarlas cuando te encuentres en un momento en el que necesites hacer visible aún más tu coche. En caso de que tengas una avería, un accidente o causa indiferente que te impida seguir con la conducción de forma correcta.
De modo es que, la realidad es que usamos las luces de emergencia cuando vamos a estacionar en doble fila, pero no es obligatorio. Es cierto que no debes entorpecer al tráfico porque sino los intermitentes no te salvaran de una posible sanción si es que supone un riesgo para la seguridad vial.
¿No sabes si debes usarlas en un atasco?
En medio de un atasco suelen encenderse las luces de emergencia de los vehículos cuando vas a frenar para avisar a los conductores que vienen detrás de ti. No obstante, se debe avisar mediante las luces de frenado o moviendo el brazo de arriba abajo con movimientos cortos y rápidos.
Eso no quiere decir que si te encuentras en un atasco ya sea autovía, autopista u otro lugar no puedas señalizar con las luces de emergencia si es que dispones de ella.