El 19,3% de los defectos graves que se detectan en la inspección técnica se deben, según AECA-ITV, a fallos en los ejes, las ruedas, los neumáticos y las suspensiones.
Por eso es tan importante pasar la prueba, ya que puede aflorar problemas que pueden suponer un riesgo en el futuro. Sin embargo, aún son muchos los conductores que no le conceden el gran valor que tiene la ITV para nuestra seguridad vial.
Preparar la ITV
Los fallos graves o muy graves detectados no nos permitirán aprobar el examen y esto significa no poder circular. Por eso, es más que recomendable que antes de la fecha de tu inspección, acudas a un taller para que pongan tu coche a punto.
Esta revisión previa a la ITV, permitirá corregir cualquier posible fallo que pudiera impedir superar la prueba y, por tanto, nos evitará una mala pasada en nuestra visita a la estación de inspección técnica.
Además de elementos como las luces, los frenos, los amortiguadores o el estado de carrocería, el personal técnico de la ITV verifica si son idóneos o no los neumáticos que llevas incorporados en tu coche, además de certificar si son aptos y compatibles con las especificaciones definidas por su fabricante.
Los neumáticos en la ITV: ¿qué se comprueba?
Ten en cuenta que las pruebas son las mismas para todos, independientemente del tipo de coche que tengas. De este modo, al pasar la ITV, el técnico de inspección:
- Revisará cada vehículo para comprobar que cumple con las indicaciones del fabricante y la Tarjeta de Inspección Técnica (en ella pueden ver la velocidad máxima de los neumáticos y la capacidad de carga: si algo está mal, se considera falta grave).
- Comprobará el estado físico de los neumáticos mediante inspección visual, para ver que no presentan ninguna irregularidad en la superficie o un desgaste excesivo. También supondrá un defecto grave si la banda de rodadura está desgastada.
- Examinará la presión de aire de los neumáticos. Una adecuada presión no sólo logra proteger la dirección y la suspensión, sino que también puede ayudar a reducir el consumo de carburante.
- Para garantizar la adherencia, se pone el foque en el estado del dibujo de los neumáticos. Los coches (categoría M1) y furgonetas (categorías N1) deberán contar siempre con un dibujo de profundidad superior a 1,6 milímetros.
Consejos para el cuidado de los neumáticos
Para mayor seguridad mientras circulas, debes tener en cuenta que, al pasar la inspección técnica, tienes que revisar los neumáticos y que estén en buen estado.
- Asegura que la profundidad del dibujo sea la adecuada a la altura de los testigos o su claridad.
- Comprueba el nivel de presión de los neumáticos una vez al mes (o así se recomienda) y siempre con el vehículo en frío.