Para crear los colores de las carrocerías de los vehículos, se estudia todo primero detenidamente. El objetivo es conseguir la validación por parte del departamento de diseño y junto al apoyo de creativos y proveedores, ofrecer el color a las calles y a las concesiones.
Es el caso de los siete colores que ofrece un vehículo Renault. Ninguno es al azar, se revisa los matices, contrastes, reflejos, aspecto mate, satinado o metalizado para llegar al color perfecto. Cuando se lanzó el color de la quinta generación de Clio, apareció el Naranja Valencia, el primer barniz coloreado que se producía en grandes series.
Raphaël, colorista del departamento de diseño de Renault que concibe cada año entre 15 y 20 colores en su taller, creó este color mediante pigmentos, nácares y otros aluminios. Está vinculado a la familia Renault desde hace 21 años, especializándose como técnico colorista tras haber sido pintor durante 10 años.
¿Ser colorista es ser artista?
El oficio de colorista consiste en componer colores que lucirán los coches al salir de fábrica. Raphaël, en la sede de Renault, cuenta con un laboratorio para poder seleccionar sus pigmentos y además tiene a su disposición tres cabinas de pintura. En el momento de sus creaciones, no se trata de que únicamente pueda elegir los colores y los materiales, sino que incluso se ayuda bajo las indicaciones de un diseñador para poder combinar cuantos colores quiera. No obstante, se limita a los colores del arcoíris.
Si el vehículo que se va a fabricar es de producción limitada, crearan un color ‘’imagen’’ con poca vida útil. En caso de que quieran que dure más, se buscará un color ‘estratégico’. Para ello el colorista Raphaël parte de unas condiciones y un muro de inspiración. Todo un artista.
En definitiva, lo que necesita el colorista es encontrar siempre ideas nuevas, tener una propuesta encima de la mesa y que ésta la apruebe el diseñador. Pero no es tarea fácil, hay colores que se pueden conseguir a la primera, y otros que complican el proceso de llegar al color deseado.
Pigmentos de colores
Existen muchos tipos de colores; los opacos, los metalizados, los nacarados, los tricapas (una capa opaca, una capa nacarada y otra de barniz) y los barnices coloreados. Los pigmentos se encuentran en la industria química. Su origen es orgánico, aunque actualmente son sintéticos.
Para crear un color, se necesitan entre tres y ocho ingredientes para definirlo correctamente. Pero el resultado deberá dosificarse para obtener buenos resultados. Por lo que igual requiere de una docena de colores diferentes. Lo importante es que se llegue al color que se llegue, éste sea ‘hermoso y asequible’, y que pueda repetirse con facilidad.
Si bien bastan entre tres y ocho ingredientes para definir un color, el resultado esperado se obtiene a partir de su dosificación. Esto puede necesitar que se realicen una docena de propuestas de color diferentes.
Entre las últimas creaciones de Raphaël se encuentra ‘Glass Flakes’, un ingrediente compuesto por diminutas bolas de cristal que se mezclan con una base o un barniz para que la pintura refleje mucho mejor la luz.
Cómo conseguir crear un color
Raphaël mezcla los pigmentos y consigue la validación del diseñador de colores, de modo que comienza a trabajar desde una fase más técnica en la que reproduce el primer ensayo del color para, acto seguido, conseguir la réplica.
Todo esto puede llevar hasta ocho semanas de trabajo para aplicarse en una superficie curva donde poder mostrarse. Mientras tanto en la fábrica, unos robots reproducen exactamente el mismo color.
Entre la creación de un color y su aplicación en una cadena de montaje puede transcurrir año y medio. No obstante, algunos colores como el Naranja Fuego de Alpine requirieron cinco veces más tiempo (ocho años, para ser exactos) antes de salir a la luz.
Los icónicos colores de Raphaël
Entre todos los colores compuestos por Raphaël, algunos se han convertido en icónicos. Este es el caso del Naranja Valencia que se lanzó con la quinta generación de Clio. Combinado con una subcapa de un color distinto, este barniz proporciona una saturación más viva y profunda al color.
La dificultad reside en que no todos los colores les sientan bien a todas las carrocerías, ni a todos los volúmenes. Por ejemplo, una carrocería con volúmenes redondos y generosos como la de Clio combinará con un color potente y saturado como el Rojo Deseo, mientras que una carrocería con volúmenes más estirados destacará más con un color metalizado, con matices de gris.
Esta noticia es sacada de la web oficial de CertifiedFirst Blog.