Una de las averías más comunes (tanto en invierno como en verano), y que probablemente la mayoría hemos experimentado, es quedarnos sin batería en el coche. Una situación que puede llegar a ser muy engorrosa si nos pilla desprevenidos, por ejemplo, en medio de un viaje largo.
No en vano, en numerosas ocasiones las baterías no avisan de que se están quedando sin carga. Eso sí, este contratiempo no nos habría ocurrido si hubiéramos realizado un mantenimiento adecuado de nuestro vehículo, acudiendo periódicamente a nuestro taller de confianza pasar su revisión.
No obstante, que se agote la batería no es el mayor de los males que puede sufrir un coche, lo que puede convertirse en una auténtica avería es cómo lo solucionemos.
¿Por qué el método del empujón puede ser una mala idea?
Seguramente, lo primero que nos haya venido a la cabeza al leer esto ha sido el método tradicional de empujar el coche para arrancarlo, y lo cierto es que esto puede ser muy mala decisión.
Y es que, esta técnica era efectiva hace años gracias a la simplicidad técnica de los vehículos. Sin embargo, ahora, los coches modernos, mucho más complejos, no son tan fáciles de arrancar cuando se quedan sin batería.
En este sentido, lo primero que debemos tener en cuenta son ciertos aspectos básicos de nuestro coche como el modelo, el tipo de cambio e incluso el combustible, ya sea diésel, gasolina o incluso propulsado por energías alternativas, como los híbridos eléctricos.
¿Y por qué el empujón no es buena idea? La respuesta está en el catalizador. Este dispositivo que se encarga de neutralizar y reducir los efectos nocivos de los gases producidos en la combustión, tiene mucho que ver en estas situaciones y es el que más va a sufrir.
De esta forma, cuando intentamos arrancar el vehículo empujándolo, lo que haremos será enviar combustible sin quemar por los conductos del escape, y también por el catalizador.
En el peor de los casos, esto puede contaminar el dispositivo e incluso puede dañarlo completamente si el combustible reacciona con los materiales sensibles que tiene en su interior, como por ejemplo el platino.
Teniendo en cuenta que hoy en día la gran mayoría de coches lleva instalado un catalizador, será imprescindible que busquemos otra alternativa si no queremos tener problemas mayores y que nuestro bolsillo se resienta aún más.
Entonces ¿cómo puedo arrancar el coche?
Existen varias posibles soluciones para hacer frente a esta situación. La opción más sencilla y cómoda es la de llamar a asistencia en carretera y que vengan ellos a arrancarlo de forma segura.
Esto te ahorrará esfuerzos y también problemas mayores que puedas provocar por la falta de conocimiento. Una vez vuelva a funcionar, no te olvides de llevar tu coche a tu taller de confianza para que revisen la batería y compruebe si es necesario realizar un cambio o existe otro problema que ha provocado el fallo.
Una segunda opción es la de utilizar un arrancador de baterías, un dispositivo portátil muy fácil de encontrar en el mercado, que tiene una batería interna y almacena esta carga para que puedas arrancar el coche.
Si no disponemos de uno, otra solución es la de pedir a alguien, si puede conectar la batería de su coche con la tuya para así transferir la carga y arrancar el coche. Esta operación, que sería en esencia conseguir el mismo efecto que con el arrancador, requiere una serie de pasos básicos, sin los cuales el proceso no dará resultado. Y para ello es imprescindible el uso de las tradicionales pero efectivas pinzas de arranca.
Cuidado con el ‘do it yourself’
En el caso de que tengas conocimiento, te veas capaz de hacerlo y cuentes con las herramientas adecuadas, también puedes optar por hacer el cambio de batería por ti mismo. Sin embargo, no es lo opción más recomendable ya que cualquier error en la desinstalación e instalación puede provocar daños secundarios.
En este sentido, si tu coche tiene el sistema Stop/Start, lo mejor será cambiar la batería en el taller puesto que será necesaria una reprogramación.
Por otra parte, si tu coche es más convencional (de combustión ‘puro’ y sin sistema Stop/Start), cuidado si dejas el vehículo sin batería durante más de media hora: la centralita del coche podría resetearse y aparecer mensajes de avería en el cuadro de mandos o en el ordenador de a bordo.
En cualquier caso, si decides cambiar la batería tú mismo, no dejes de consultar las recomendaciones del libro de mantenimiento de tu coche, y ante la menor duda no sigas y acude a un experto.