El aumento de vehículos eléctricos que circulan por las carreteras ha hecho que las compañías del sector se vuelquen en mejorar distintos aspectos, funcionales y de seguridad.
Sin embargo, uno de los puntos que más preocupan es qué se debe hacer en caso de que se produzca una colisión.
Teniendo en cuenta este aspecto, Bosch ha creado unos semiconductores que ayudan a prevenir el riesgo de descargas eléctricas después de un accidente mediante microchips diseñados para desactivar, en una fracción de segundo, los circuitos eléctricos del vehículo. Esto permite que los equipos de rescate puedan trabajar inmediatamente y asegurar que el personal de primeros auxilios y los ocupantes del vehículo permanezcan seguros.
Ante esto, la marca asegura que sus chips semiconductores hacen que la batería de alta tensión se desconecte de manera automática de modo que nadie en el lugar del accidente pueda entrar en contacto con los componentes portadores de corriente.
Asimismo, la firma recuerda que los vehículos modernos contienen docenas de circuitos integrados para controlar no solo las funciones de seguridad, como los airbags y los pretensores del cinturón, sino también el control de crucero, los sensores de distancia, el asistente de luz de carretera, la ayuda al mantenimiento del carril, los sensores de lluvia y el detector de somnolencia del conductor.