En un coche con motor térmico o de combustión, independientemente de que sea de gasolina, o diésel, debe contar con cilindros. Aunque no lo sepas son una parte fundamental y que incide decisivamente en el consumo y rendimiento del vehículo, por lo tanto, debes saber de ellos y cómo funcionan, pero sobre todo, qué averías puedes encontrarte.
Los cilindros son huecos del bloque del motor, en los que se introducen los pistones, que son propulsados por las detonaciones o combustiones de la mezcla (aire/combustible) y producirse el movimiento.
De este modo, los pistones deben moverse libremente dentro del cilindro y, por tanto, sus cabezales nunca deben rozar los cilindros. Así, el objetivo es garantizar la estanqueidad y que no se produzca ese contacto con las paredes del cilindro.
Para ello, una capa de aceite lubricante que interpone entre ambas partes. Esto sirve para mejorar la eficiencia y reducir la temperatura, sin que se produzca una péridad del rendimiento.
Cómo funciona un cilindro
La principal función de un cilindro es permitir la combustión y servir de guía para el pistón. Es decir, servir como ‘cuerpo’ para garantizar la estanqueidad a las que nos referíamos anteriormente con relación a los gases y la contención de explosiones. Se puede decir que los cilindros de un coche tienen dos funciones:
- Mecánicas: hacen referencia a la presión que ejercen los gases dentro del cilindro.
- Térmicas: sobre las temperaturas variables en el ciclo.
Los cilindros no actúan solos, ya que trabajan junto a multitud de partes como las válvulas de admisión y de escape, el árbol de levas, la bujía, el inyector, la cámara de combustión… para favorecer el movimiento del vehículo.
Qué tipos de cilindros existen
En cuanto a los tipos existen variaciones según algunos parámetros. Pueden ser:
- Por volumen: es la cilindrada, aquella que cuanto mayor sea, ésta también lo será lo que se traduce en unas mayores prestaciones que harán que tenga más rendimiento.
- Por construcción: en este caso pueden ser abiertos (se fabrican en dos piezas, un bloque superior y otro inferior con el cárter, unidos por una junta). O cerrados (se fabrica en una sola pieza, sujetado al cigüeñal con casquillos de bancada).
- Por conductos de refrigeración: aunque aquí también hay varios tipos como open deck es decir, cuando los conductos por donde fluye el refrigerante rodean a los cilindros o close deck, que en este caso no dan la vuelta al cilindro, sino que simplemente pasan paralelamente a él a través del bloque motor.
Número de cilindros de un motor
Existen motores de un número variado de cilindros, desde los monocilindro, hasta los de 8 o más cilindros, como los de 10, o 12 con distintas disposiciones (en línea, en V, opuestos, boxer, en W…).
Sin embargo, en los motores de los coches de calle, tanto todocaminos, como deportivos, o utilitarios, las configuraciones más populares son de 4 cilindros en línea, y 6 u 8 en V.
También, en los últimos años están proliferando los motores de 3 cilindros, que destacan por su bajo consumo, con potencias que pueden llegar hasta superar los 150 CV.
Motores sin cilindros
Por último, también existen los denominados motores rotativos o tipo Wankel, que son motores de combustión que han empleado algunos fabricantes en sus modelos como Mazda, y que carecen de cilindros y pistones. para sustituirlos emplean un rotor que gira para realizar los cuatro tiempos en distintas zonas de un estátor o bloque.
Síntomas de avería en los cilindros del motor
Como puedes imaginar, el motor es un complejo sistema que necesita estar perfectamente sincronizado para no fallar. Por ello, si un cilindro está en malas condiciones, roto o defectuoso hará que el vehículo no funcione correctamente.
Ten en cuenta que si alguno de los cilindros del motor dificulta el movimiento del pistón y la mezcla no se quema de forma adecuada, el combustible puede dirigirse al escape, y el catalizador y la sonda lambda pueden averiarse.
Reparar a tiempo posibles averías en los cilindros evitará daños mayores, y más caros en el motor. Por eso, nada mejor como un buen mantenimiento preventivo para evitar averías en tu coche.