España registra alrededor de 37.000 sustracciones anuales. Estos son los pasos que debes seguir si te sucede.
Cuando te roban el coche o la moto hay algo peor que pensar en la pérdida material y económica. Eso viene después. Antes de pensar en ello, está la duda de pensar si cerraste e inmovilizaste bien el vehículo, la rabia de no poder hacer nada al ver un hueco vacío donde antes estaba tu coche o tu moto, e incluso, el pensar que habías aparcado en otro sitio… pero no. Una vez asimilas que te han robado el vehículo, debes seguir unos pasos, bien por si lo encuentras y todo queda en un susto, o por si en el peor de los casos el vehículo no apareciera.
En primer lugar, denuncia el robo en la Policía Nacional. Puedes ir de manera presencial o poner la denuncia de manera telemática. Una vez hecho esto, se procederá a la baja por sustracción del vehículo. Con ello, quedarás libre de responsabilidades ante cualquier infracción que se cometa con tu vehículo.
Después de la denuncia, debes hablar con tu seguro. Te pedirán una copia de la denuncia y te indicarán, según tu póliza, como proceder y se generará un parte por robo.
Por otra parte, si la documentación estaba en el vehículo al robarlo, deberás hacerte con un duplicado en la DGT o en las oficinas de Correos para evitar un uso fraudulento de la misma. También puedes encontrar el permiso de conducir y el de circulación en la app de MiDGT.
Y aquí es donde vienen los dos posibles desenlaces: Que aparezca el vehículo o que no. En el peor de los casos, es decir, que tu coche o tu moto no aparezca tras el robo, deberás contactar de nuevo con tu seguro para que se de por desaparecido de manera definitiva y cobres la indemnización por robo. Está será mayor o menor según la póliza que tengas contratada. Si por el contrario tienes más suerte y encuentran tu coche o tu moto, debes contactar de nuevo con la Policía Nacional para que en la denuncia figure que ha aparecido y que se vuelva a dar de alta para conducirse de forma legal. Si tu póliza no cubre la opción de robo, los daños causados en tu vehículo correrán a tu cargo.