Estos puntos pueden ahorrarte disgustos y dinero a la hora de elegir tu vehículo usado
Siempre que nos compramos un coche nuevo, vamos con toda la tranquilidad del mundo a elegirlo a nuestro gusto al concesionario, y lo único que rompe esa tranquilidad es el tiempo de espera hasta que nos entreguen el vehículo. Con un coche de segunda mano ocurre al revés. Lo tendremos de inmediato, pero hay que revisar ciertos aspectos para saber si está en buen estado y no nos vamos a dejar mucho dinero en reparaciones una vez lo adquiramos.
Suspensión
Si te apoyas en casa una de las esquinas y empujas hacia abajo deberá de volver a su sitio inicial. Si no, te va a tocar cambiar amortiguadores, y te saldrá desde 300 euros.
Sistema eléctrico y de alumbrado
Hay que comprobar que no tenga subidas y bajadas ni que parpadee. En su funcionamiento, actúan desde el alternador, que son unos 200 euros hasta la centralita de luces, que ronda el mismo precio. También es conveniente comprobar el aire acondicionado y la calefacción, dos elementos eléctricos muy a tener en cuenta por su precio. Hasta 800 euros si hay una fuga.
Los kilómetros que marca
Debes tener en cuenta que el vendedor puede no actuar de buena fe y ha podido manipular los kilómetros. Para verlo, y de paso observar como ha tratado el coche, mira el desgaste del volante, asientos, pedales… Si están más desgastados de lo normal indicando un kilometraje bajo, es mejor que busques otro modelo.
El encendido
Sea diésel o gasolina, el encendido del coche ha de ser rápido. Si no arranca con facilidad, renquea o se cala, puede haber un problema en el sistema de combustible que puede llegar a costar unos 2.500 euros, o algo más leve, como los calentadores, unos 150 euros o un sensor de temperatura, aproximadamente 60 euros.
Que no eche mucho humo
Cuando dejes el coche a ralentí, bájate y comprueba que no eche humo en exceso, y sobre todo, que no sea blanco. También debes desconfiar si el humo es azul o negro.
Fíjate en el volante
Primero comprueba que tras girar vuelve a su posición, pues si no es así puede haber una avería desde 90 euros a 200 si es la cremallera de dirección. Comprueba que a una velocidad de unos 80km/h, en recto, no se va hacia algún lado. Esto se solucionará con un paralelo, pero puede que también te toque cambiar los neumáticos si están desgastados de forma desigual.
Los líquidos
Antes de cerrar tu compra debes comprobar los niveles de los líquidos. El aceite no debe estar ni muy oscuro ni pegajoso. El líquido de frenos también se oscurece y puede oxidar las piezas internas. También el refrigerante tiene que estar en nivel y de su color.
Frenos
Son vitales para tu seguridad y deben comprobarse siempre. Para hacerlo, a unos 60 por hora, en una calle sin tráfico frena de manera contundente y comprueba que el coche frena sin irse para ningún lado. En caso de que lo haga, esto debe arreglarse y puede llegar a costar 400 euros.
Caja de cambios y freno de mano
Pon el freno de mano e intenta acelerar. El coche debería oponer resistencia a moverse. Si no lo hace estará desgastado y serán unos 400 euros su sustitución. Para comprobar la caja de cambios, prueba las machas haciendo que engranen sin problemas.
Lo demás
Mira que los neumáticos estén en bus estado y con un desgaste uniforme entre ellos. También la chapa te puede dar detalles de si ha tenido algún impacto de gravedad. Comprueba el estado de las lunas y que estén bien selladas, así como que no haya óxido en la batería ni que la dirección ni la transmisión hagan ruido.