El Rey del rock era un auténtico apasionado de las cuatro ruedas dentro y fuera de la pantalla
De todos es conocida, Love Me Tender, o Little Less Conversation, por supuesto. De muchos es conocido que Elvis era un apasionado de los coches y que tuvo una gran colección con coches como un BMW 507, por ejemplo. Pero solo unos pocos saben que además era mecánico y que además de conducirlos, le gustaba mancharse las manos de grasa para repararlos, tanto dentro, como fuera de la pantalla.
Y es que El Rey trabajó de mecánico cuando aún no era conocido por su voz ni por sus movimientos al bailar. Presley tuvo que ganarse el pan trabajando con llaves inglesas antes que con guitarras y mancharse de arriba abajo de grasa de motor antes que poderse dar baños de multitudes y de fans coreando su nombre.
Mecánico dentro y fuera de la pantalla
Pero la cosa no queda ahí. Porque Elvis protagonizó una película en la que ni si quiera tuvo que actuar. Así es. En la cinta Kid Galahad, del año 62, encarna a Walter Gulick, un boxeador que tras terminar el servicio militar quiere recuperar su tranquila vida en Nueva York trabajando, como no, de mecánico de coches. La película, a su vez es un remake del film con el mismo título de 1937 protagonizada por Edward Robinson y Bette Davis.
Elvis era capaz de dejarte boquiabierto con dos acordes y una estrofa, o con solo mover su cintura como solo el sabía. Pero también era ese amigo tuyo al que sin dudarlo llamarías si has tenido algún problema con tu coche.