Se tiene la sensación de que los coches que llevan una cadena de distribución son eternos. Algo de verdad puede haber pero no es real que el mantenimiento sea cero y que se conserva en perfectas condiciones mientras dure el motor. Sin embargo, las cadenas de distribución pueden desgastarse, estirarse e incluso romperse.
¿Cuáles son las causas del desgaste o rotura de una cadena de distribución?
- Defecto de fabricación o montaje.
- Un mantenimiento inadecuado o insuficiente (falta de lubricación).
- Exposición del vehículo a condiciones climatológicas extremas.
- Conducción por terrenos y carreteras con exceso de polvo.
- Conducción inadecuada.
¿Cómo se puede reconocer una avería en este sistema?
Normalmente, cualquier anomalía de la cadena se puede advertir por un ruido como traqueteo. Mientras que, por otro lado, se produce la pérdida de potencia del motor y el tensor de cadena se muestra totalmente extendido. Indicadores que un mecánico notará nada más abrir el capó.
Es muy raro que se dé el caso de una cadena de distribución rota. En este caso, ya no podrás seguir conduciendo, sino que tienes que remolcar el coche y llevarlo a un taller.
En el caso de una avería, el problema no suele estar en la propia cadena de distribución, sino en uno de sus accesorios, a menudo el tensor de cadena o los carriles guía. Se deben sustituir ambos cada 100.000 hasta 300.000 km y es una buena idea hacer cambiar la cadena de distribución al mismo tiempo, ya que el trabajo es el mismo. El coste de la cadena no es especialmente alto.
Averías que puede tener
- Cadena elongada. La causa puede ser la mala calidad del aceite debido a la presencia de agua, suciedad o deterioro por antigüedad. También puede deberse a la falta de lubricación por una boquilla de inyección obstruida. Otros motivos pueden ser el kilometraje elevado, la corrosión o un tensor bloqueado o no activado.
- Marcas de contacto en los eslabones interiores, suele estar provocada por una desalineación entre las poleas de cadena o bien porque una de las poleas está dañada. También conviene comprobar si la cadena está discurriendo por la guía o si los carriles están torcidos. Una última causa puede ser el mal funcionamiento de los ejes, que pueden presentar holgura radial.
- Marcas de contacto en los eslabones exteriores, eso es la señal de que la cadena no está discurriendo por la guía, o los carriles se han montado torcidos o no se han fijado correctamente.
- Daños en los carriles tensores y carriles guía
- Superficie desgastada, síntoma de un kilometraje elevado.
- Falta el borde del carril, puede deberse al mal funcionamiento del tensor de cadena, al fuerte desgaste de las poleas de cadena o daños en las pestañas.
- Marcas de abrasión en soporte y orificio desviado, indica un fuerte desgaste de las poleas de cadena o bien un defecto en la posición de los carriles.